PSICOLOGÍA INTEGRAL

Los desafíos que nos presenta el momento actual, humano y planetario, desde la perspectiva de la Salud Mental, exige una apertura a miradas integradoras para poder dar cabida a la complejidad humana y sus grandes paradojas existenciales. Nos encontramos viviendo un momento de muy fuertes contrastes, marcados por un lado por la alta tecnologización en todos los aspectos de la vida cotidiana y las promesas de mejoras que estos sistemas ofrecen para nuestra calidad de vida, y por el otro, por el más profundo deterioro de la salud humana y el sistema natural que nos alberga y da sustento. Destrucción de los ecosistemas, guerras, violencia, depresión, injusticia, vacío, pérdida de identidad y sentido de vida, desorientación individual y colectiva, cuadros severos y agudos de dolor y enfermedad, entre otras dificultades, son una constante que afecta todos los sistemas de organización humana.

La Psicología Integral está interesada en el desarrollo de una individualidad sana que incluya los aspectos más elevados y creativos de cada ser humano, a la par de su consciencia y armonía natural con su entorno y con su dimensión colectiva y espiritual. Este punto de vista pone el acento en el reconocimiento de que, detrás de las máscaras y los roles de la personalidad condicionada, yace un estado más profundo de conciencia que trasciende la identidad individual y el destino marcado por los patrones familiares y culturales heredados y aprendidos.

Su campo incluye y relaciona aspectos fundamentales de la filosofía y sabiduría de las grandes tradiciones espirituales del mundo, las cosmovisiones originarias, disciplinas espirituales contemporáneas, la mitología, la antropología y las artes. Abarca también el campo de las investigaciones sobre la conciencia y las teorías cuánticas y psicológicas de la ciencia occidental contemporánea.
Podemos decir que la Psicología con orientación Integral (integradora) busca facilitar niveles de desarrollo y salud crecientes, abriendo consciencia acerca del tejido unificador que entrelaza nuestra experiencia humana en todas sus áreas. Sin pretender ‘todología’, la Psicología Integral busca expandir la conciencia más allá de los límites que se derivan de los modelos tradicionales de salud mental que utilizamos, para así intentar soluciones originales. También puede llamársela psicología de la salud, ya que es prioritario y central para esta corriente generar comportamientos orientados hacia una salud en su sentido orgánico, tanto en el sistema individual, como en el tejido de lo colectivo y comunitario.